Un grupo de voluntarios de Omaha Rapid Response se prepara para viajar a Texas con el objetivo de brindar apoyo en las labores de recuperación tras las devastadoras inundaciones ocurridas el pasado 4 de julio. La organización, que ya respondió en abril a emergencias causadas por tormentas severas en comunidades de Nebraska e Iowa, ahora enfocará sus esfuerzos en el estado sureño.

Serán quince los equipos de voluntarios que se desplazarán hacia el oeste de Kerrville, considerada una de las zonas más afectadas por las recientes lluvias. Su labor estará centrada en atender las secuelas del desastre, colaborando en tareas de limpieza, distribución de suministros y apoyo comunitario.

Antes de su salida programada para el domingo, los voluntarios han solicitado el respaldo del público para ayudar a cargar suministros que serán enviados al área de emergencia. Las personas interesadas en colaborar pueden inscribirse a través del sitio web oficial de la organización.

A este esfuerzo humanitario también se ha sumado Nebraska Task Force 1, que inició operaciones la semana pasada. Esta unidad especializada ha desplegado equipos de rescate que incluyen botes, helicópteros, perros entrenados y otros recursos avanzados para la búsqueda de sobrevivientes en medio de las zonas anegadas.

La coordinación entre organizaciones civiles y cuerpos de rescate estatales busca ofrecer una respuesta rápida y efectiva ante una catástrofe que ha dejado daños significativos en infraestructura y viviendas.