Omaha, Nebraska – El Distrito de Energía Pública de Omaha (OPPD) dio a conocer su Plan Operativo Corporativo preliminar para 2026, con el objetivo de mantener costos competitivos para sus clientes pese a las presiones inflacionarias, el incremento de requisitos regulatorios y la creciente demanda de energía. La propuesta, presentada ante la Junta Directiva durante la reunión de todos los comités, contempla un presupuesto de 2.98 millones de dólares y un aumento promedio de tarifas del 6.3% a partir del 1 de enero, sujeto a aprobación en diciembre.

El ajuste incluye un incremento general del 5.8% y un 0.5% adicional en el concepto de Ajuste por Combustible y Energía Comprada (FPPA), destinado a cubrir variaciones en costos de insumos fuera del control de la compañía. El impacto será diferenciado: los clientes residenciales enfrentarán un aumento del 6%, lo que se traduce en aproximadamente 7 dólares adicionales en una factura promedio de 115 dólares; los clientes comerciales tendrán un alza de 3.7% y los industriales de 8.9%.

Entre los factores que impulsan la medida se encuentra la necesidad de ampliar la capacidad de generación y transmisión para garantizar márgenes de seguridad en el suministro eléctrico. A ello se suma el encarecimiento de materiales esenciales como cobre, acero y hormigón, indispensables para la construcción y mantenimiento de infraestructura.

La empresa ha implementado medidas de contención de gastos, logrando reducir cerca de 60 millones de dólares mediante la congelación de contrataciones no esenciales y la postergación de proyectos de construcción y mantenimiento. Pese a un aumento acumulado del 25.2% en costos de operación durante los últimos cinco años, OPPD solo ha trasladado el 14.2% de ese incremento a sus clientes. Según la Administración de Información Energética, las tarifas de la compañía se mantienen un 30% por debajo del promedio nacional.

El plan para 2026 incluye proyectos estratégicos como la ampliación de generación, mejoras en transmisión y distribución, enterramiento de más líneas eléctricas, incremento en la poda de árboles y refuerzo del sistema contra condiciones climáticas adversas. También se prevé la instalación de nuevos medidores y el lanzamiento de herramientas digitales como un portal de clientes renovado y un mapa de interrupciones más detallado.

La compañía reconoce que cualquier ajuste tarifario puede resultar complejo para quienes atraviesan dificultades económicas. Por ello, ofrece programas de apoyo como facturación presupuestaria, asistencia energética y climatización, disponibles a través de sus líneas de atención y en OPPD.com.