LINCOLN, Nebraska – La Legislatura de Nebraska dio un paso más este martes en la implementación de restricciones adicionales a los proveedores de servicios de aborto, al aprobar preliminarmente el proyecto de ley LB632 con una votación de 34 a 11.

La propuesta establece que las instalaciones de salud que realicen abortos deberán encargarse de la disposición de los restos fetales únicamente a través de cremación, entierro o bajo las directrices que emita la Junta de Salud del estado. Esta medida busca regular de manera más estricta los procedimientos posteriores a una interrupción del embarazo.

Los defensores del proyecto argumentan que la iniciativa se basa en principios de respeto y dignidad, mientras que sus opositores advierten que podría traducirse en barreras adicionales para las mujeres que buscan este tipo de atención médica, especialmente en zonas con acceso limitado a servicios de salud reproductiva.

Este avance legislativo se suma a otros debates recientes en el Capitolio estatal relacionados con el aborto. En febrero, los senadores estatales escucharon testimonios públicos sobre otro proyecto de ley centrado en el aborto mediante medicación, el cual también incluía requisitos sobre el seguimiento médico a las pacientes.

De avanzar en las próximas rondas legislativas, la LB632 podría convertirse en una de las regulaciones más específicas en cuanto al tratamiento de restos fetales en el país, alineándose con una tendencia observada en otros estados conservadores que buscan imponer controles más estrictos al acceso al aborto.

La discusión continúa generando fuertes reacciones tanto en grupos defensores de los derechos reproductivos como entre sectores que promueven restricciones más severas. Se espera que el proyecto de ley enfrente más revisiones antes de su posible aprobación final.