Residentes de Nebraska y legisladores estatales han reaccionado luego de que el presidente Donald Trump firmara una orden ejecutiva que impone su plan global de aranceles recíprocos el miércoles. Según informó The Associated Press, las tarifas incluyen un impuesto del 34% sobre las importaciones provenientes de China y un 20% para la Unión Europea, entre otros países.

La medida ha generado preocupación entre los habitantes de Nebraska, quienes temen un aumento en el costo de vida debido a los efectos secundarios de los aranceles. Se anticipa que los precios de alimentos, repuestos de automóviles y otros productos esenciales se vean afectados, lo que complicaría la economía familiar, especialmente para quienes dependen de ingresos fijos o limitados.

Por otro lado, algunos sectores han mostrado su apoyo a la medida del presidente Trump. El senador Pete Ricketts elogió la decisión, destacando que el mandatario cumple sus promesas de campaña al nivelar el campo de juego y defender los intereses del pueblo estadounidense. Según el senador, los aranceles recíprocos garantizarán un trato justo para las empresas estadounidenses frente a las prácticas comerciales desleales de otros países.

Sin embargo, críticos y analistas económicos advierten que los nuevos aranceles podrían desencadenar una guerra comercial, afectando negativamente a exportadores locales y aumentando los precios para los consumidores. Nebraska, un estado agrícola dependiente de las exportaciones de productos como el maíz y la carne de res, podría enfrentar repercusiones económicas significativas si los países afectados responden con medidas similares.